Un hombre mira a una mujer atractiva en la misma forma que una mujer mira a una linda mariposa, llama su atención por un segundo, pero pronto sale de su mente.
Es que no hay necesidad de hacer un estudio para saber que TODOS los hombres mirarán a otras mujeres incluso teniendo un monumento de pareja. Pero acaso ¿es esto culpa de ellos?
Como somos de la misma especie, los hombres y las mujeres compartimos un cerebro muy similar pero las diferencias entre ellos pueden parecer que somos un mundo totalmente diferente.
No se puede culpar a un hombre por ser hombre, a pesar de que las mujeres lo hayan estado haciendo durante siglos. Esto se puede entender un poco más cuando conocemos las profundas diferencias entre el cerebro femenino y el masculino.
Los hombres poseen la zona cerebral de “proteger su territorio” (núcleo premamilar) más grande que la de las mujeres. Y su amígdala, la que lo alerta de amenaza, miedo o peligro es incluso más grande.
Mientras que en las mujeres poseen esa área de “yo siento lo mismo que tú” más grande que ellos por lo que ellas se pueden sincronizar más fácilmente con los sentimientos de los demás leyendo expresiones faciales, tonos de voz y otras señales no-verbales.
Pero quizás, la mayor diferencia que puede haber entre el cerebro de hombres y mujeres es que ellos poseen ¡2.5 veces más grande el área del cerebro que se encarga del deseo sexual!
Tal vez ya hemos hallado un culpable, y es que los hombres por naturaleza andan siempre en búsqueda de sexo y de una pareja fértil con la cual aparearse pero, no se preocupen mujeres, los hombres son capaces de enamorarse y quedarse enganchados a la relación tal cual lo hacen ustedes, o incluso más.
Cuando conoce y selecciona a “la indicada” hará todo lo posible para conquistarla y tener relaciones con ella, si tiene éxito su cerebro hace un escaneo perfecto de ella, donde la lujuria y el amor chocan para quedar encantado y enganchado con ella como por arte de magia.
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